Emprendimiento familiar que nace como respuesta a la falta de oportunidades laborales y la crisis vivida durante el último periodo, pero que con el tiempo toma un nuevo giro a partir de los relatos históricos de una carismática y querida abuelita.
Como si de sus manos brotara magia, fue capaz de fertilizar tierra dura e inservible, misma tierra que hoy cubierta de flores acompaña sus tardes de sol y jardín. En reconocimiento a su vida este pequeño jardín lleva su esencia puesta en el nombre.